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Signos de una mujer saludable

Hay señales o signos que nos ayudan a saber si nuestro cuerpo está sano. La salud es un estado de equilibrio donde el cuerpo funciona correctamente en todas sus áreas. A veces las personas especialmente las mujeres creen que están sanos porque no tienen síntomas de una enfermedad puntual. Pero hay señales o signos que nos ayudan a saber si nuestro cuerpo está sano. Los signos de que el cuerpo de una mujer está sana son: -tener buen humor y animo al comenzar el día -tener energía para realizar las actividades diarias -tener el ciclo menstrual en forma regular -dormir bien durante toda la noche -el color de la orina es claro – evacuar heces todos los días -si las uñas están fuertes y con aspecto rosado -se tiene deseo sexual -se tiene un peso adecuado en forma estable Es importante saber que todos los ítem anteriores deben cumplirse no solo algunos para poder estar sanos. Sentirse sano es tener ganas de hacer cosas y de enfrentar los desafíos diari

Reafirmar la flacidez de los brazos

Muchas mujeres sufren de flacidez en la parte superior de los brazos. A medida que se va envejeciendo, la piel va perdiendo el colágeno y la elastina, lo cual hace que los tejidos conectivos mantengan todo unido. Con la falta de estos nutrientes el resultado es negativo, es decir, que la piel debajo de los brazos se vuelve flácida y da un aspecto de gelatinosa y arrugada.

Uno de los principales causantes es el aumento repentino de peso, este genera que los brazos se vuelvan “alas de murciélago”. Pero aún, cuando se pierde peso, no hay garantía de que la flacidez que se presentó desaparezca. De hecho algunas personas que son delgadas también tienen este problema. // desde Blog de Farmacia
Para poder eliminar la tan desagradable flacidez en los brazos se pueden tener en cuenta algunos métodos caseros y en especial ciertos tips, es importante cumplir con cada uno de ellos para contrarrestar la situación.

Cuando los brazos se hacen flácidos el problema es relacionado directamente a la apariencia física. Son muchas las mujeres que se desesperan y hasta les pasa por la mente arreglarlo en el quirófano con una cirugía correctora. Cabe destacar que no siempre es necesario operarse ya que existen otros tipos de tratamientos.

Sin dudas tonificar y reafirmar la piel de los brazos no es tan difícil como parece o como se indican en algunos casos. Lo que se necesita para poder afirmar la piel superior es en primera instancia perder de peso con remedios naturales, para poder eliminar las partes antiestéticas. Es necesario contar con fuerza de voluntad, disciplina y constancia, una mentalidad positiva, ejercicio físico y una alimentación saludable.

Para poder ir viendo los resultados positivos es necesario ser muy constante con el plan recomendado por un período por lo menos de 6 meses en adelante.

En estos casos la fuerza de voluntad es clave para tener éxito en la meta establecida. Ya que si se mantienes una mentalidad positiva, se repiten las motivaciones y se visualizan los resultados, y se hará más fácil mantener firme el propósito.

Con respecto a alimentación recomendada en los cuadros de flacidez es muy importante quemar las grasas, por lo que se necesita un dieta balanceada que incluya proteína magra como es la leche descremada, pescado, salmón, pollo, frijoles, carbohidratos saludables tal como granos enteros, frutas y vegetales, y grasas saludables en este caso almendras, aceite de oliva.



Para realizar los ejercicios que reafirmaran la piel de los brazos se necesitan pesas de 2 a 5 libras dependiendo de la condición física de cada persona. Si se está acostumbrada a usar pesas, se puede utilizar con mayor peso. Se debe arrancar calentando con una caminata al menos de 5 minutos. Y luego deben hacer 3 sets de 10 repeticiones cada uno con las pesas.

El primer ejercicio recomendado puede hacerse estando sentada o parada, se sostiene una pesita por encima de la cabeza con ambas manos en un extremo de la pesa. Se baja la pesa lo más posible por detrás de la cabeza y se cuenta 1-2-3-4. Hay mantener la posición por un segundo y se cambia de lado.

Para el segundo ejercicio hay que estar acostada ya sea en la cama o en una colchoneta, se acuesta boca arriba con las plantas de los pies sobre la superficie, las rodillas dobladas y la cabeza en el borde. Con una pesita en cada mano, se extienden los brazos por encima de la cabeza. Se doblan los brazos por los codos, se bajan las pesas con cuidado por detrás de la cabeza hasta la frente. Luego se vuelve a la posición original y se repite.

Otra opción que resulta beneficiosa es una rutina de ejercicios cardiovasculares y se le añade una sesión de flexiones o las llamadas lagartijas.
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